De acuerdo con diplomáticos norteamericanos consultados por este espacio sobre el flujo migratorio que llega a la Unión Americana desde México, en enero de 2021 los servicios de Migración y de la Patrulla Fronteriza de la nación vecina abortaron en 76,000 ocasiones el ingreso de indocumentados, sea deportándolos, sea negándoles papeles en la frontera -o ambos. Esa cifra llegó a 96,000 detenciones en diciembre pasado. El mejor mes de detenciones bajo la administración Trump sumó 144,000 en mayo de 2019. En diciembre de 2023, bajo el gobierno Biden -según esos reportes-, la cifra alcanzó 302,000.
Con base en las mismas informaciones, durante el gobierno Biden, al menos una tercera parte de los extranjeros indocumentados que ingresó a México decidió permanecer en el país, por no poder siquiera acercarse a la línea fronteriza, o por tener un proyecto por desarrollar en nuestro país, lícito o ilícito. Eso, se dijo, puede representar cerca de cinco millones de personas en cuatro años, sin que nadie sepa en realidad dónde se hallan y a qué se dedican.
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