Por Roberto Nava.
El himno a Tlaxcala ha sido el talón de Aquiles de funcionarios que han llegado al Estado y que los ha metido en apuros tras no saber la letra del mismo ni mucho menos la tonada.
Y aunque pareciera un hecho intrascendente, entonar el himno además de que es una obligación en eventos oficiales permite a los tlaxcaltecas identificarse con el mismo.
Lo vemos en las escuelas, desde los más pequeños lo entonan con emoción porque ya lo traemos en la sangre.
No se trata de habilidades en el canto o no, el sentimiento y la identidad es algo que difícilmente alguien de la legión extranjera que se ha adueñado del Estado, pueda entender.
A partir del 31 de octubre de 1986, fue instaurado en el Estado como obligatorio, entonar el Himno a Tlaxcala, tanto en escuelas del Estado así como en ceremonias cívicas oficiales.
La columna completa, aquí:
El PAC en la lona, por calent…ras de la maistra, ¿cómo era la tonada? (ahorainformat.com)