Por Martín Ruiz
Al interior de la Secretaría de Educación Pública se acercan tiempos difíciles, convulsionados y aciagos.
Si al gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros le llevó más de dos años decidir y encontrar los elementos legales para despedir a Gwendolynee Amaro Ramírez, ex dirigente sindical de la Delegación D-III-I de Personal de Apoyo y Asistencia Educativa de la Sección 31 del SNTE, hoy su probable sucesora en el cargo viene recargada y con el ánimo de seguir la lucha y el movimiento de la otrora aliada del lorenismo.
La dirigencia de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación que encabeza Cutberto Chávez de la Rosa publicó hace días la convocatoria respectiva y será este viernes 5 de julio cuando se lleve a cabo la elección del nuevo líder de esa poderosa delegación sindical.
Hasta donde se sabe, Gwendolynee Amaro operó para registrar una planilla que responde a sus intereses, la cual es presidida por Vianey Tapia Razo, hija del ex orticista y ex secretario de Movilidad y Transporte en la actual administración, Juan Tapia Pelcastre.
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La rebelión que viene en la SEP – Señorio Tlaxcalteca (e-consulta.com)